El permafrost es una capa de suelo que permanece congelada durante al menos dos años consecutivos. Se encuentra en regiones polares como Siberia, Alaska y Canadá. El deshielo del permafrost debido al calentamiento global puede liberar grandes cantidades de metano y dióxido de carbono, lo que contribuye al cambio climático. Además, puede afectar la estabilidad del terreno y las infraestructuras construidas sobre él.

Entradas relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *